“If I Could Sleep On The Pitch, I Would”

Leimer Contreras, Venezuela

Leimer Contreras is a coach for the La Guadalupe soccer school in the community of Mi Pequeña Barinas in San Antonio del Táchira, Venezuela. He is originally from La Guajira, Colombia. He coaches children living in underprivileged conditions who face heightened protection risks, related to the presence of armed groups in their community and surrounding areas.

Leimer has collaborated with UNHCR in the creation of a youth network that promotes safe spaces and protection through sporting activities, contributing to peaceful coexistence among members of his community.

Leimer Contreras es entrenador del equipo de fútbol de La Guadalupe en la comunidad de Mi Pequeña Barinas, ubicada en  San Antonio del Táchira, Venezuela. Él es oriundo de la Guajira, Colombia. Leimer entrena a niños y niñas que viven en situación de vulnerabilidad y que enfrentan serios riesgos de protección asociados a la presencia de grupos armados en su comunidad y en  comunidades cercanas.

Leimer ha colaborado con ACNUR en la creación de una red de jóvenes que promueve espacios de protección a través de actividades deportivas, contribuyendo con la coexistencia pacífica entre los miembros de esta comunidad.

Can you introduce yourself and tell us about your football life?

My name is Leimer Contreras. I am 33 years old and I grew up in La Guajira, Colombia, close to the border with Venezuela. At 15, I moved to Venezuela and I have now been here for 18 years. I have a wife and four children - José Manuel (17), Juan José (14), Thiago Lionel (7), and Dominic Abraham (6).

I began playing soccer when I was 8 years old and joined my school’s team. I played a lot, it was what I did the most. I still remember when we were in Riohacha, walking one or two hours every day to go to soccer practice.  My love for football motivated me to travel the long distance. However, things at home were not going well.

At the age of 12 I had to abandon soccer and my studies to begin working and helping my mom put food on the table and care for my little brother. At 15 we left Colombia. There were many painful factors, triggered by the social violence in La Guajira, our difficult economic situation, and the devastating loss of my younger brother. Following this tragic loss, my mom decided for us to leave my beloved Colombia.

I now work as a coach at a soccer school (La Guadalupe) in the community where I live, in San Antonio del Táchira. I promote sport as an activity that reduces risks of violence for the children in this community.

Mi nombre es Leimer Contreras. Tengo 33 años y crecí en La Guajira, Colombia, cerca de la frontera con Venezuela. Cuando tenía 15 años, me mudé a Venezuela y he vivido aquí durante 17 años. Estoy casado y tengo cuatro hijos: José Manuel (17), Juan José (14), Thiago Lionel (7) y Dominic Abraham (6).

Comencé a jugar fútbol cuando tenía 8 años y me uní al equipo de mi escuela. Jugaba mucho, era lo que más hacía. Aún recuerdo cuando vivíamos en Riohacha. Caminábamos una o dos horas todos los días para ir a la práctica de fútbol. Mi amor por este deporte me motivaba a recorrer esta distancia tan larga, sin embargo más allá del fútbol, las cosas en casa no iban bien.

A los 12 años, tuve que abandonar el fútbol y mis estudios para comenzar a trabajar y ayudar a mi mamá a llevar comida a la mesa y a cuidar a mi hermanito. Cuando tenía 15 años, nos fuimos de Colombia. Hubo muchos factores dolorosos que se desencadenaron por la violencia social presente en La Guajira, nuestras dificultades económicas y la devastadora muerte de mi hermanito. Tras esta trágica pérdida, mi mamá decidió que debíamos abandonar nuestra amada Colombia.

En estos momentos, trabajo como entrenador de fútbol en una escuela de fútbol (La Guadalupe) en la comunidad donde vivo en San Antonio del Táchira. Yo promuevo la práctica deportiva como una actividad que reduce los riesgos de violencia a los que se ven expuestos los niños y niñas en esta comunidad.

What did you try to show with the photos? Was there any other wider meaning?

The adults in the photos are from different communities participating in a local tournament in my community that was organized at our school. The young people with the yellow uniform are from the school in my community.

The school that I coach at is in Mi Pequeña Barinas. Being a border community, it is notably exposed to risks of violence. Access to public services is limited and unreliable, with constant power outages that, in turn, affect telecommunications. The constant border crossings undertaken by residents to Colombia for work or to purchase basic goods like food and medicine leave the local population vulnerable to the armed groups operating in the area.

The children in this community remain unsupervised for long periods of time, exposing them to risks of abuse and exploitation. As a father, I recognise the need for recreational activities, so I encourage children and their parents to play soccer on the community sports field as a means of insulating them from risks of violence.

We play at the sports field in Mi Pequeña Barinas that was restored and refurbished by UNHCR as part of its strategy for the creation of “safe spaces” in Venezuela.  Facilities were improved and also equipped to serve as a place of social gathering in the community and a recreational area for children and adolescents.

With these photos, I tried to show the passion with which soccer is lived in my country.  Despite so much pain and suffering that we have gone through, we continue to fight for a dream of being someone in life.

These are people who work hard to provide for their families, including several young people who left school to work and help support their parents and siblings.

I do what I love. Soccer is something important in my life. I did not have the chance to become a professional player because there were not many opportunities, but the dream does not end.

Los adultos que aparecen en las fotos son personas de diferentes comunidades que participan en el torneo local de mi comunidad, que fue organizado en nuestra escuela. La gente joven con el uniforme amarillo son de la escuela de mi comunidad. 

La escuela, donde trabajo como coach, está ubicada en “Mi Pequeña Barinas”. Esta es una comunidad fronteriza que está particularmente expuesta a riesgos asociados a la violencia. El acceso a los servicios públicos es limitado e inestable, con constantes interrupciones en el servicio eléctrico, que a la larga, afectan a las telecomunicaciones. Los constantes cruces de personas hacia Colombia para trabajar o para adquirir artículos de primera necesidad, tales como, alimentos o medicinas, dejan a la población local en una situación de vulnerabilidad frente a los grupos armados que operan en la zona.

Los niños y niñas de esta comunidad permanecen solos sin supervisión de un adulto durante largos períodos, lo cual, los deja expuestos a riesgos de sufrir abusos y explotación. Como padre, reconozco la necesidad de recrearse  que tienen los niños y niñas, así que, los animo a ellos y a sus padres a jugar fútbol en la cancha deportiva comunitaria, como una forma de mantenerlos alejados de estos riesgos asociados a la violencia.

Jugamos en la cancha deportiva de Mi Pequeña Barinas, la cual, fue restaurada y acondicionada por ACNUR, como parte de su estrategia de protección que busca crear espacios seguros en Venezuela. Los espacios fueron mejorados y equipados para que puedan funcionar como un lugar de encuentro social dentro de la comunidad, así como un área de recreación para niños, niñas y adolescentes.

A través de estas fotos, traté de demostrar la pasión con la cual se vive el fútbol en mi país. A pesar del dolor y el sufrimiento que hemos atravesado, hemos continuado luchando por nuestro sueño de “ser alguien en la vida”.

Estas son personas que trabajan muy duro para mantener a sus familias, incluyendo a algunos jóvenes de la escuela de fútbol que tuvieron que dejar sus estudios para trabajar y apoyar económicamente a sus padres y hermanos y hermanas.

Yo hago lo que me apasiona. El fútbol es algo importante en mi vida. No tuve la oportunidad de convertirme en jugador profesional, porque no habían muchas oportunidades, pero el sueño no se ha acabado.

Why is football important to you and your community?

Training the children of my community is something that fulfills me because it offers them the opportunity to dream and work hard.  These are the same dreams I wished I had when I was a child, but I did not have those opportunities.

Soccer practice has to go beyond just the enjoyment of the sport.  I want to share my love for soccer while also making a meaningful contribution to the community that welcomed and received my mom and me when we most needed it.  This led me to make the decision to coach boys and girls.

Football is my everyday. If I could sleep on the pitch, I would.

Entrenar a los niños de mi comunidad es algo que me llena mucho, porque les brinda la oportunidad de soñar y trabajar duro. Estos son los mismos sueños que me hubiese gustado tener cuando era un niño, pero no tuve esas oportunidades.

La práctica del fútbol tiene que ir más allá de su propio disfrute. Yo quiero compartir mi pasión por el fútbol, mientras que hago una contribución significativa a la comunidad que  nos recibió a mi mamá y a mi cuando más lo necesitamos. Esto me inspiró a tomar la decisión de entrenar a niños y niñas.

El fútbol es todo para mí, si pudiera dormir en la cancha, lo haría.

What are the opportunities for female footballers in Venezuela?

Women's football here is very hard. Even for the male footballer it is difficult to become a professional. There is little support and the sport is very expensive. Our athletes move abroad because we all seek that dream of being a professional footballer and helping our own families to give our children a better future. 

El fútbol femenino aquí es muy duro. Incluso para los jugadores hombres es muy difícil convertirse en profesionales. El apoyo que reciben es limitado y el deporte es muy caro. Nuestros atletas salen del país persiguiendo el  sueño de todos de convertirse en profesionales y ayudar a sus familias y dar a nuestros hijos un mejor futuro.

What ambitions do you have for the future?

I want to continue being a soccer coach, to continue helping my community. But I leave my future to God. I work hard, but with my feet well planted on the ground.

Quiero continuar siendo entrenador de fútbol para seguir apoyando a mi comunidad. Pero yo dejo mi futuro en las manos de Dios. Yo trabajo duro, pero con los pies en la tierra.

Refugees

Goal Click Refugees is an ongoing project collaborating with refugees, asylum seekers and internally displaced people from around the world. 

Created in partnership with UNHCR, The UN Refugee Agency, our ambition is to highlight the important role football can play in rebuilding the lives of displaced people and supporting integration into host communities.

Previous
Previous

Guiding Girls

Next
Next

From Flute To Football